Rol del psicólogo en relación al Consejo de Curso
Es necesario señalar que la educación
chilena actual a tendido a pretender mejorar las capacidades de los educandos
utilizando un conocimiento tecnicista en el cual se intenta medir y
objetivar las políticas y estrategias
que se usan para la enseñanza del conocimiento, es por ello que se ha
promulgado el rol del psicólogo educacional centrado en la rehabilitación de
los individuos despojándolos de su calidad de sujetos activos y transformadores
que se desenvuelven en un contexto cultural sumamente complejo y cambiante. El psicólogo
desde este enfoque se aprecia entonces como un sujeto experto y por tanto con poder sobre los sujetos que interviene y también
se le otorga un rasgo de especialista el cual es capaz de develar la naturaleza
de normalidad o anormalidad de los alumnos. Este tipo de enfoque en razón al
rol del psicólogo suscita una visión homogeneizante y patologizadora concibiendo la realidad educativa
de manera estrecha y originándose una concepción individualista de los
problemas educativos y excluyendo muchas veces a los otros agentes educativos
en su quehacer profesional.
Es por ello imperante redefinir este
rol por uno mas amplio y complejo que responda a la gran cantidad de variables
que actúan en el rendimiento y éxito tanto de los individuos como de la institución
desarraigando con ello una mirada separatista y conformando una visión
unificada, compleja e interdependiente de las acciones y estrategias que se lleven
a cabo en cada uno de los ámbitos educativos.
Para esto es necesario re conceptualizar el quehacer educativo de manera
con-constructiva con todos los agentes, “esto implicaría un cuestionamiento de
los conceptos, acciones y de los sentidos de esas acciones” ( Ossa , 2011) y también en un trabajo
reflexivo y critico individual del psicólogo y su propio campo de acción.
Basándose en este enfoque de rol es
que se puede sugerir que el quehacer del psicólogo respecto al “consejo de
curso” es en primera instancia el de psicoeducar a los docentes respecto a la
relevancia del consejo de curso dentro de la dinámica educativa, en este haber
el informar de manera constructiva el quehacer del docente dentro del consejo, así
también como el definir desde distintas perspectivas la función que conlleva el
consejo de curso dentro de la institución es primordial en la posterior disposición que
tengan tanto los docentes como los alumnos de esta actividad. Es necesario que los
docentes se encuentren bien informados en relación a que el consejo de curso se
constituye como se hace alusión en el decreto en un “espacio de diálogo, reflexión y estudio
dentro del cual el curso, constituido como una comunidad de trabajo de carácter
democrático, planifica y adopta decisiones destinadas a ejecutar acciones
proyectos escolares y extraescolares, que beneficien el desarrollo integral de
los miembros del grupo y en especial sus capacidades sociales, cooperativas y cívicas”
(Decreto Supremo N°220), esta información debería luego ser transmitida a los
alumnos, con lo cual se podría formar una alianza de trabajo ya que ambos
tendrían el conocimiento de la importancia de esta instancia para alcanzar las
metas y desarrollo del grupo.
El psicólogo escolar debiera poner su
conocimiento a disposición de las necesidades que el grupo curso sostiene, así también
él mismo podría identificar otras y ayudarlos en la satisfacción de estas,
enmarcado en un trabajo colaborativo y horizontal en el cual se reflexiona y
aconseja al docente en las mas adecuadas estrategias para ayudar a los alumnos
a resolver los conflictos que surjan durante el consejo promoviendo siempre la
diversidad de pensamiento y la tolerancia de esta como forma de resolver los
problemas de manera innovadora.
Es necesario que el psicólogo promueva
que los agentes perciban esta instancia como una herramienta que permite a los
estudiantes reflexionar en conjunto sobre las fortalezas y debilidades que tienen en colectivo. A su
vez es importante que los educandos
visualicen que de llegar a un consenso en el cual determinen los cambios que necesitan
para poder superar las debilidades y potenciar las fortalezas, conllevará un
beneficio para el grupo, cada uno de los
integrantes de este y de la comunidad educativa
Por cierto
este proceso trae grandes beneficios adyacentes como lo son, el mejorar la
participación, la comunicación, el sentido de pertenencia con la institución y
su comunidad así también como generar un pensamiento alternativo pro consenso,
para lograr las metas que los mismos estudiantes se propongan.
El psicólogo en este haber es de
esencial importancia pues podría actuar como agente externo capaz de visualizar
de manera más racional y crítica los comportamientos que amenacen la sana
convivencia (violencia, discriminación, exclusión) así también como él informar
al docente en estrategias que promuevan una sana comunicación basadas en la empatía.
Por tanto el consejo de curso supone
un participación activa del psicólogo pues en ella se pueden identificar
dinámicas que puedan afectar el buen desempeño tanto de los estudiantes de
forma individual como colectiva, fomentando en el docente técnicas que
promuevan la participación e inclusión de cada postura y consensuándola en un
todo coherente se logra demostrar a través
de la práctica la importancia del diálogo como solución a los conflictos internos
y externos del grupo curso. Además ayuda al docente a conocer e informarse
sobre diversos aspectos de la dinámica educativa, social e interpersonal de los
estudiantes pudiendo intervenir con ello en los aspectos académicos y
relacionales de sus alumnos.
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